Modelo de familia sacrificante.
En este tipo de parejas, habitualmente uno de los puntos clave de su visión del mundo es el sacrificio, considerado como el comportamiento más idóneo para hacerse aceptar por el otro y para mantener estable la relación. El resultado es la falta de satisfacción de los deseos personales y la continuada condescendencia con las necesidades y con los deseos de los demás.
¡Ojo¡ La carta del sacrificio puede jugarse también para dominar la relación.
MODALIDADES COMUNICATIVAS.
El contenido de los discursos gira siempre en torno a la idea central de que el deber de los padres es el de sacrificarse.
Parece que el asunto sea que la vida es una cadena continua de obligaciones.
Las palabras sacrificio y deber son los términos más recurrentes en la filosofía de vida. También, muchos discursos hacen referencia también a la desilusión experimentada por el inexistente aprecio de las privaciones y renuncias soportadas a favor del bien común.
También se critican los comportamientos de aquellos padres que buscan el placer y que descuidan a sus hijos.
Argumentos frecuentes de la comunicación tratan sobre la satisfacción ajena, sobre los propios dolores físicos y morales, sobre la ingratitud, la enfermedad, sepelios, muertos, separaciones, guerras, epidemias.
Los hijos, normalmente intentan que los padres acepten su diferente visión del mundo y de la vida y les exhortan a divertirse más, a salir, pero los padres responden que para satisfacer sus necesidades de hijo, ellos tienen que continuar sacrificándose y dejar de hacer muchas cosas.
Relaciones.
Las relaciones son a menudo asimétricas y el que se sacrifica, aunque en apariencia humilde y sometido, está en una posición de hierro, porque a través de sus renuncias obtiene una posición de superioridad, haciendo que los demás se sientan siempre culpables o en deuda. Esto crea un juego familiar que se fundamenta en un sistema de débitos y créditos con deslizamientos hacia el lado del chantaje moral.
Si el sacrificio de los padres no es reconocido o apreciado por el hijo, se lamentan, se enfadan y tachan a los hijos de desagradecidos.
Las reglas.
En este caso hay que distinguir entre las reglas que gobiernan el comportamiento de los padres y las de los hijos.
Reglas de los padres:
1.- En la vida hay que sacrificarse por los demás para sentirse amados y aceptados.
2.- El placer es una experiencia que no hay que buscar, solamente el placer de dar a los demás es legítimo.
3.- Los padres o uno de los dos, son la columna en la que descansa la familia y asumen sobre sí todo lo que incumbe a la vida diaria de la familia.
4.- Aquel padre que es exonerado de cualquier incumbencia familiar orienta todas sus energías en el trabajo.
5.- Los padres tienen la expectativa de que los hijos les recompensarán por todo lo que han estado haciendo por ellos, teniendo éxito en la vida u obteniendo todo aquello que ellos no han podido tener.
Reglas de los hijos:
1.- Es un deber de los padres dar a los hijos lo que necesitan o, por el contrario, es un deber del hijo satisfacer a los padres.
2.- Los padres tienen la obligación de mantenerlos sin límite de tiempo o es una obligación del hijo trabajar para contribuir al presupuesto familiar.
3.- En la vida hay quien se sacrifica y quien de esto saca beneficio.
¿Qué significados emergen?
¿Cuáles son las consecuencias en las acciones de las personas?
Se ha observado 3 tendencias en los hijos de estas familias: